¿Que comes?

No me pasó a mi, pero creo que es digno de contarse.
Seguramente han pasado por esos momentos en el que tienen algo solo para ustedes y no lo quieren compartir, una coca-cola bien fria, unas pápas adobadas con limón, unos pepinitos.... en fin, piensen en lo que sea, pero que no lo compartirian con absolutamente nadie en este mundo. Para mi amiga, ese "lo que sea" eran unos chocolatitos que le gustaban mucho cuando era niña y que los había conseguido en la fiesta de cumpleaños de algún vecino.
Y como suele suceder, cuando tenía ya la boca hecha agua, saboreandose de antemano esos pequeños chocolatitos, justo depués de haber abierto la bolsita, se acercó su hermana y con una voz amable, pero que en esos momentos la escuchó como si fuera una amenaza, le preguntó -"¿Me das?- y mientras su cabeza le decía que no, su boca pronuciaba lo contrario y su mano tomaba un chocolatito y lo depositaba en la mano de su hermana; acto seguido se acercó su sobrino y le dijo: -"¿A mi también me das uno?. Lo que provocó que mi amiga tomara aire y lo retuviera por un momento más prolongado que lo normal, -"ten"- le dijo, mientras sonreia muy forzadamente. No conforme con eso, se le acercó su pequeña sobrina de apenas cinco años de edad, y con esa mirada de ángel, le estiró la manita y le dijo -"tia, me das uno?"- Y sin tener remedio alguno y llena de resignación se lo dió, ya que no podía negarse.
Después de haber repartido forzadamente sus chocolatitos, se acercó una niña, completamente desconocida y le preguntó -"¿Que comes?"-
-"Ya es suficiente!!!"- pensó mi amiga, -"Primero mi hermana y luego mis sobrinos!!!! Y ahora esta pobre ilusa, a quien conocen nada más en su casa, pretende que yo le de uno de mis chocolatitos!!! Pero no!! Esta demente si cree que le voy a dar uno!!!"- Entonces le respondió indiferentemente: -"CACA"- mientras se comía un chocolatito, creyendo que con su respuesta, aquella niña se daría la media vuelta y se retiraria; pero en lugar de eso, se le quedó viendo fijamente y le preguntó:
-" A mi también me van a dar caca?"-
Por lo que mi amiga, resignadamente, tomó el último chocolatito de su bolsa y se lo dió a la pequeña desconocida.